Luis E. Calderon Romero

Verso Rojo-Verso Negro.

Verso Rojo

Negrita, aquí está mi pluma

que es una prolongación

de mis arterias y venas.

Con sangre te escribo hoy.

 

Por eso mi verso es rojo

como el ocaso del sol.

Un pacto sangre de toro,

que acabe si muerto soy.

 

Negrita, mi sangre es roja,

como late, te la doy.

turbulenta y angustiada.

Llena de luz y dolor.

 

Negrita, te necesito,

devuelveme por favor,

Con tus ardientes caricias

la confianza en el amor.

 

Negrita, se toda mía

no te guardes tu pasión,

que me devuelva la vida,

si es que vida tuve yo.

 

Dame tu suave sonrisa

donde guardas el calor,

que estos inviernos derritan,

que congelan mi pasión.

 

Solda tu piel con la mía.

Trenza tu luna y mi sol.

Vivamos una poesía

en una explosión de amor.

 

Negrita, mi sangre es roja.

Y el verso que escribo hoy,

es  sangriento, es agonía,

pues me desangro de amor.

 

 

Verso Negro.

Negrita, mi tinta es negra

y el verso que escribo yo,

es ausencia, es agonía.

Vacío de existencia estoy.

 

Negrita, nunca supuse,

recibir tal dardo hoy.

que me ensarta contra el mundo.

Mudo de dolor estoy.

 

Negrita, mi canto es negro.

Mi corazón te lo doy

repleto de sangre negra.

Eso será lo que soy.

 

Las letras negras, son negras,

negro el pensamiento de ellas.

negros son tus sentimientos

aunque te sientas tan bella.

 

Todo se volvió tan negro,

que blanca es la oscuridad.

Y yo, muriendo de pena,

en tan negra soledad.