SARA TANCREDI

Padre

En mi soledad existente 
reflexiono muchas cosas, 
cosas que a través del tiempo 
se han quedado convertidas 
solamente en un anhelo. 
Un anhelo vehemente 
que a veces me lastima 
el alma sin piedad; 

y al observar el pausado paso 
de un anciano te miro en él 
y me digo, 
¡cuanto! me hubiera gustado 
haber estado contigo 
en los últimos días de tu vida... 

Pero no pude,tú te fuiste de mi lado 
en mi temprana infancia. 
Y ahora que ya estás morando en el cielo 
todavía anhelo los momentos 
que nunca pude vivir contigo. 

Hoy,de nuevo,y como tantas veces 
al observar a un anciano te recordé 

Y miré en sus cabellos plateados 
tus cabellos 
Y en las arrugas de su rostro 
imaginé tu lasitud. 

¿Cómo sería tu vejez? 
¿Cómo sería tu vida sin el calor 
de tus primeros hijos? 
¿Y cómo hubiera sido mi vida 
si nunca te hubieras ido de mi lado? 

Mis interrogantes jamás podrás contestar, 
pero si yo hubiera crecido a tu lado 
mi vida estaría colmada 
de hermosos recuerdos 
Recuerdos que ahora mitigarían 
un poco la tristeza 
por causa de tu partida final. 

Padre,descansa en paz, 
¡¡¡tu hija te ama Y siempre te amará!!! 
Algún día volveremos a estar juntos, 
juntos de nuevo,allá, 
más allá de las estrellas 
Donde todo es amor y felicidad.