Franco Castillo

Sadomasoquismo literario

El artista es desdichado, valga la redundancia.

Rechaza tal rótulo porque su naturaleza no amerita bautismos mundanos.

La tristeza en el arte es tanto parturienta como recién nacido, y a su vez, la dolorosa maravilla de dar a luz. Esto genera un efímero instante de alivio que se traduce en placer y solemos confundir con felicidad. Durante esa confusión nos reconciliamos con la vida.