Emiliano Veinte

En la música, tú.

Llora un bandoneón.

La luna es la única que te ve, los acordes desangran las notas que hablan de tu lejanía y cubren con arreboles de tristeza la luz que te ilumina.

En el piano palpitan los arpegios de tu presencia en mi cuerpo y quedan grabados en mi corazón los pentagramas de tus caricias en silencio.

Tu voz grave y serena sacude las fibras de mi alma y abraza con las canciones que me cantaste, cada instante en que anhelo tu presencia.

Las notas de amor hechas canciones reverdecen cada mañana junto a un café, con el aroma de tu sonrisa y el sonido de tus miradas.

Entre canciones y poemas, entre sueños y las más bellas realidades, hemos escrito y cantado nuestra interminable historia de amor.

El más tierno poema, la más bella canción, la suave melodía de tu voz; eso te hace a ti.

Eres música y pasión, eres poesía y amor.