El Hombre de la Rosa

¡¡¡ SOBREVIVIR DONDE JAMÁS LLEGUE LA MAR !!!

 

¡¡¡ SOBREVIVIR DONDE JAMÁS LLEGUE LA MAR !!!

 

 *** Versos de la Rosa ***

 

Buda indicará a los hombres el fin de la vida humana

cuando llegue caos a la harmonía de gabela material,

en las montañas donde mora el Buda de la concordia

el lugar de paz y entregas por su ciencia que atesora,

en activa espiritualidad los secretos de la humanidad

esperando el día señalado para entregar sus trofeos.

 

Monjes que atesoran el saber antiguo de las mantras

 humanos tan puros que le consagran con fuego sacro,

demostrando una sensatez desde sus lares más altos

sin cadencias de delirios con firmeza espuria de vivir,

que gozas la añeja esperanza cuando giras la rodadla

profesando deseo de dejar la soberbia humana fuera.

 

Cuando las personas actúan motivadas por la envidia

 no saben existir con afecto consigo ni con los demás,

según la base de enseñanza budista del bien y el mal

se debe a nuestro dudoso deseo del apego a lo banal,

que cualquiera considera imperioso cuando no lo son

raya angustiosa de su vida en la naturaleza humana.

 

Por estar distante al pacto y armonía del ser humano

en la búsqueda de los objetos vánales que deseamos,

creamos el uso cierto del desafío del gran despilfarro

 como medidas supuestamente reflexivas y vigorosas,

sabiendo que lo compasivo tiene esa especie limitada

han dejado sus llanuras para que las sumerja su mar.

 

Construyeron sus edificios en sus cumbres más altas

ahuyentados de los periódicos cataclismos naturales,

buscan su pureza placidez y su deber lo maneja todo

 atesora todos esos inventos humanos para más tarde,

hombres legítimos que sanan el sufrimiento humano

 siendo perenes guardianes de su portilla del Nirvana.

 

Acciones prodigiosas propician su sentido a la verdad

vivir como persona es su acontecimiento más común,

sensato es utilizar esa oportunidad de forma efectiva

 deberás buscar la sensatez en el trascurso de tu vida,

hasta que encuentres placidez en su cumbre celestial

 cuando lo caótico asole el equilibrio de su naturaleza.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

26 de agosto del 2018