Carlos Dguez

Tu ausencia

Tu ausencia dejó un vacío

imposible de llenar,

te esfumaste como el río

que va en busca de la mar.

 

No pudimos despedirnos

y no supe retenerte,

nada había qué decirnos

que pudiera detenerte.

 

De pronto se hizo la noche,

de pronto llegó el olvido

cruel, y sin mediar reproche

quedó vacío nuestro nido.

 

Aún le lloro a tu recuerdo,

aún sufro sin tu presencia,

constantemente me acuerdo

de tu rostro, de tu esencia.

 

No volverás, lo presiento,

pero espero que algún día

llegues, no a mi pensamiento

sino a darme tu alegría.

 

Y algún día que te canses

mi corazón aún te espera,

ven, para que descanses,

ven nuevamente a mí, vera.