Luis E. Calderon Romero

Alcohólico

Que rico es el aguardiente,

que dulzura me da su condición

de pasar a una vida menos dura,

en cada libación.

 

Que amargura me da en el otro día

y siempre sin razón

en esta vida sadomasoquista

que genera el licor.

 

Que goce y que dolor en la existencia

se van turnando en el bebedor

sin importarnos el amor ni la ciencia,

nada vale lo que haya alrededor.

 

Somos monstruos rellenos de violencia

y también de dolor.

sólo buscamos disolver nuestra vivencia

en un vaso de alcohol.