Adrian VeMo

Plegaria

 

 

Ángel de los suicidas ora por ellos.

No le permitas la soga al cuello

ni el cañón dentro la cueva del paladar.

Ellos continúan lanzando sus ojos por la ventana,

sin embargo,

hay fobias que asustan con siniestros incendios

a sus corazones.

Ellos, desligan sus venas

porque la sangre es gas y no es roja

les gusta ver como sus vidas se evaporan en su delante.

Ángel de los suicidas

no les ahorres el camino turbulento.

Quítales la guillotina cotidiana

y el disfraz

de esa muerte evidente y lenta

que se disimula

con anfetaminas y ron.

 

Ángel de los suicidas

ora por él

ora por ella.

Quítales la precariedad de sus enanos pasos

y la heroína que silencia su lucidez

¿qué prisa tiene el purgatorio por ellos?

Ponles otro dios que no sea Tánatos

y puedan ellos encenderle velas con esa fe irremediable.

Ponles luciérnagas como mascotas

antes de esa acherontia atropos

que les avisa y seduce en sueños.

 

Ángel de los suicidas

ora

por mí.