MARVOG

DESDE LA INDOLENTE CICATRIZ

 

Desde el comienzo todo fue luz en la noche de las letras

se crearon los lápices y un sacapuntas afiló el grafito

fiel transparencia a contracanto entre los delirios de un pasaporte sin luto

desnudando los póstumos vientres a la indolente cicatriz del laberinto

creando ríos en las blancas llanuras de los árboles de fuego

líneas entre colosales tintas enlazadas de fonema y pinto.

 

La nariz sin rabia engendraba el lúdico planetario que hacía agua tras la pulcra sangre equivocada

mares de hierba apuñalaban la sed purpúrea tras el último orgasmo aún por primavera

floreciendo los caminos de las sombras entrañas del verso

oleadas de gozo sangraban esperanzas en un latir de efímeras metáforas.

 

Volaban las engañadas tierras pariendo lombrices por corazones raíz

envolviendo el deseo que penetraba a través de las alas en mágico sufragio

que rendía tributo a la vida en un sacrilegio de letánicos ecos

sin ser más que latones de espinas zurciendo una mortaja al viento

sangrantes trigos inseminaban la voz al roncar de los insomnios

al final todo fue flor de amaranto el día que palpitó la sonrisa del alfabeto.

 

 

MARVOG