Hector Vasquez

Dejame Volar


Dicen que no existe más sincero adiós
Como el adiós que se da en los aeropuertos
Ese adiós, entre labios y medio seco
Acompañado de una leve llovizna
De sentimientos encontrados
Es adiós, que se convierte en un hasta pronto
Y en ocaciones ha llegado a llamarse
El último adiós, un hasta nunca
Un adiós, que se día con día
Se vuelve más repetitivo
Un adiós que cada día que pasa
Se enfría como el invierno de alaska
Un adiós que nos cuesta pronunciarlo
Sabiendo que ese viaje tiene retorno
Un adiós que se queda estático
Cuando el viaje no tiene retorno.