Ayer te soñé
Ambos jugueteábamos,
sonreíamos.
Éramos
Soñé con tal conexión,
la que anula la razón
y altera el alma.
Te soñé
Soñé que nos besábamos.
Un beso
juquetón, inocente, tímido;
de aquellos sin rastro.
Cuan victoria efímera