Virginia de Albán

MÁS FRÁGIL QUE LA NOCHE...

 

Acaso todo es tu mirada…

Acaso sobre tu cuerpo

se extiende esta noche que soy yo.

Acaso te bebes

la noche de mi cuerpo en tu mirada…

 

Acaso es tu aliento inevitable,

aún más frágil que la noche

entre mis ojos…

 

Debajo de mi almohada

escondiste una invasión de noches.

Acaso las guardaste

impredecibles para el amor.

Acaso guareciste ángeles

debajo de mi almohada…

 

Acaso todo es como tus huellas

profanadoras de crepúsculos:

 

Reveses de la luz

bajo mis sábanas,

acechándome toda la noche

hasta el volante amanecer.

 

Acaso duermes tan mío

que tan sólo pareces despertar…