William Irving Howard Lopez

Amistad

 

Casa sólida,

en piedra y no en arena,

son nuestras manos en blanca amistad,

más allá de las tonalidades y  brillos

de la piel, de las banderas

o de cualquier signo banal.

Paso a paso, beso a beso

adelante...

juntos…

por sobre la estirpe y la sangre

marchando  en una misma senda,

irguiendo  la torre fuerte,

construyendo en el presente

una luminosa alborada 

que  resplandezca

en  nuestros pechos

eternamente como un solo corazón.