Labios estriados,
por besos robados;
y al untarlos de mieles,
las ansias que desquician,
se retraen inapetentes,
fugandose a otro lado.
Tus labios incitantes,
complacidos conversan,
una mitad con la alegría,
circunstancias delimitan;
la otra mitad...con el llanto.
Cerrados y abiertos,
de noche, de dia,
de mañana y tarde,
en otoño, en invierno,
suavemente besados.
Aquí están!
ya los tengo!
excitando mis sentidos.
Desprendidos,
flotantes,
resurgidos
de entre purpureas
y cristalinas estelas.
Avistan delicias,
se deleitan y reservan,
contienen secretos,
experimentan,
desvelan nuevos,
también antiguos deseos
creidos extraviados,
perdidos y cancelados;
de nuevo aparecen!