argantonio

En Babel

Mezclarme en esta confusión de edades

en donde yo pierda la mía.

 

Mezclarme con los olvidados que

todavía es tiempo

en los atardecéres sus miradas apagadas

se pierden en el pozo de sus adéntros.

 

Mezclarme con los creyentes del amor y el

fuego, para compartir mis dudas y mis alegrías

antes que todos obedezcamos al becerro de oro.

 

Mezclarme con los niños para

recuperar la memoria

y reabrir los ojos.

 

Mezclarme con los ancianos que venéran los ocasos.

 

Mezclarme en la sensualidad infinita sin

más patrón que el amor infinito.

 

Mezclarme con los últimos tigres delatádos por

el color. Indómito antes que desdentado y decrépito

en la jaula de un circo.

 

Mezclarme con las aves que dominan las dos orillas

de mi río en en lentos ocasos de marismas.

 

Acercarme a tu verdad.