Vito_Angeli

A una rosa (soneto doblado)

Me has dejado deliciosas espinas que minan,

filo de dagas que te caminan

sobre la piel, hirviendo sus heridas amor;

irresistible tentación que ahuyenta el dolor

remplazando con alegría al temor,

iluminando un sendero, do manos habitan.

 

Me has ofrendado ese tallo verde, que glorifica,

enseñándonos tu verdad mítica;

cuerpo sostén, base de reposo a la pasión,

pasión que son tus pétalos ante adoración

cuando ellos brillan en noble acción,

fulgida como el sol, por su calor vindica.

 

Me has dado tu fidelidad sin ningún reproche;

aroma a sueños con tu belleza perfumados,

momentos de ser nunca igualados,

fe y entrega que sólo nos pudo haber juntado.

 

Me has brindado luna de día como sol de noche

entregaste todo, hasta lo que se había partido;

retoños que esperan recorrido,

el amor de saber que, en mi vida, todo has sido.