Joval

¡¡Solo por verla feliz...!!

El sol le desea

un día grandioso

a su amada luna,

sabe que dé si mismo

depende su brillo.

 

Cada instante,

a cada segundo,

cada minuto,

se esfuerza

por resplandecer

de manera espectacular.

 

Para que su apreciada luna

no pierda su luz

y en su momento

relucir,

y él,

gustoso acepta

 su responsabilidad.

 

Al finalizar el día,

cuando élla,

aparece mágicamente,

la luna

resplandece

majestuosa.

 

Y sabe el sol,

que valió la pena

por verla brillar,

por saberse protegida

y amada…

Solo por verla sonreír,

por verla feliz.