LUIS ADONAY VENEGAS LEYTON

Caminando siempre al infinito...

Caminando siempre al infinito…

 

Una simple mirada al horizonte

sin intención de finales

hará variar  los límites

sin ponerle límites a nada

y a nadie

solo siguiendo la pisada

de lo imposible

para hacerlo posible

y lograr el horizonte,

ese que se soñó tan lejos

tan desafiante

- inalcanzable…

 

El pequeño tiempo se suma

y se hace tiempo,

el instante se agrega

y se hace  momento,

la semilla se siembra

y se hace planta,

el grano de arena se junta… reúne

y se hace playa

que se eleva y escala…

se hermana y se hace duna.

 

La mirada se aleja… se alarga

y desde lo alto de la duna

el horizonte se agranda,

se profundiza y ya no se alcanza

- la inmensidad se hace infinita.

Es el desafío de los sueños

para emprender los vuelos

los de inicios de germen,  de raíces

y semillas desafiadas,

conmovidas, disponibles

para ir en búsqueda de las dunas

que cada uno va formando

para ampliar su mirada

en aventura de horizontes más lejanos

brizna a brizna, gota a gota

hasta llenar el vaso de la vida

para que derrame…contenidos

que serán reales o irreales.