Del libro La Vida es Viviendo
Te guardo en mi mente como guardo el silencio,
dibujando airecillos que vuelan por el tiempo,
adornando la historia que se escribió en mí cuento,
y que hoy son recuerdos de mi camino eterno.
Constante en mi memoria recuerdo los sucesos,
las personas que amo o las que amé en mis sueños,
el caminar tranquilo de mis triunfos abiertos,
y, también, el tormento de fracasos secretos.
Cada historia vivida se convirtió en recuerdo,
hoy viaja en mi memoria como el tren del silencio,
a veces sabe a gloria recordar los intentos
y otras veces es útil no repetir tropiezos.
La vida es autopista de trenes del recuerdo
y todos piloteamos trenes de nuestros tiempos,
qué grato es ver pasar, de repente, en silencio
el vagón donde viajan los amados recuerdos.