juan pablo LHP

PACTO EN LA DERROTA

Vi como se cae de rodillas
y vi también como levantarse 
sacudiéndose el polvo 
y los ojos 
para ni siquiera 
imaginarse un mañana
con tamaña ausencia 
y sin sentido. 
Testifiqué 
ese pacto entre derrotados
para no hipotecar verdades
para señalar lo justo 
y abrazar lo construido
pese al tiempo 
y los errores. 
Comprendí al fin
tal como lo sugiere el Alcalde
que a pesar de los naufragios
siempre nos va a rondar
ese leño salvador 
al cuál no solo 
tenemos que abrazar
sino que también cuidarlo 
porque en definitiva 
nuestra vida también
depende de eso.