...Desde que el hombre inventó la palabra “madurez”
no hemos podido dormir
porque los pliegues del tacto
no simbolizan la savia dulce en las mañanas
porque el desorden
siempre existirá
como el oro en la frente de todos los mamíferos
tantas luces en las catedrales de tu sexo
tantas colonias
impregnadas de sudor
tal vez creímos
que las oraciones combinan plegarias
en las sillas donde la realidad
se viste de cuclillas
cuando de pronto las anclas
pesan lo mismo que una hostia
*
siempre la sensación de espaldas a tu reino
siempre el colapso
tendido como un orate en la avenida
una seducción
que es primera al momento del adiós
*
no quiero atravesar dimensiones
sin antes tallar el busto de tu árbol...