Ernesto Nexticapa Javier ( Escritor Nocturno)

A ELOISA


¡Cómo no recordarte amada mía!

si, en tus brazos encontré bonanza,

en mis sueños floreció la añoranza

vos fuiste exquisito vid que bebía;


llenabas mi limitada existencia

entre tus juegos, besos y caricias,

llenabas de luz mis arcas vacías

bendito bálsamo era tu presencia.


Un milagro aquel maná de tus labios

contigo rosas de abril florecían,

purpúreas, perfumadas crecían

llevando aroma al mar y sus navíos.


Majestuoso y brillante ángel alado

plumaje puro y blanca vestidura,

fuiste bendición, gran añadidura

eras musa de cabello rizado.


Recorrimos los sublimes paisajes

el amor y la ternura equipajes,

en tu andar iluminabas colores

probamos la miel y los sinsabores


El amor nocturno, una utopía

escribiendo versos como en papiros

mis labios pluma, tinta mis suspiros

emula tu alma, gran antología.


Siento cerca el ocaso de mi vida

este vate en su poesía no te olvida

llega hasta mí, la luz de tu sonrisa,

mi boca pronuncia tu nombre… Eloisa