Esteban Mario Couceyro

Amor Ășnico

Cada vez que te amo

en tu cuerpo muero

como furiosa tormenta

diluvio el esfuerzo

la respiración

es viento

que danza en copas

de ramas crujientes.

 

La naturaleza colapsa

en tus ojos

desbordados

con el ritmo de las aguas del mar

golpeando en mi pecho.

 

Quiero gritar

como el primer estruendo

de la naturaleza

uniendo mi voz a la tuya

y que todo se ilumine

como el sol de estío.

 

Cerrar los ojos

y que termine el día

que todo concluya

sin que continúe

que nada haya existido

que no se repita

y

cortando los tiempos

se apaguen los luceros.

 

Que la creación

hubiese sido

solo

para los dos

y nuestro amor.