gatoconbotas_58

Desaparecida

He ido una y mil veces hasta tu casa

me paré frente a la puerta en vano día

hasta la noche esperé enfriar las brasas

de mi alma cansada en esta cofradía.

 

Ojos me miraron por encima de la muralla

y yo que siento dentro mío correr hormigas

he pensado en volver y atraparlas, atarlas

como prolongación de mis dedos y caricias.

 

Hoy como siempre he vuelto a tu morada

con la carga pesada de tanta melancolía

la habitual presencia de tu ausencia cotidiana,

mi amada, mi triste amada, mi desaparecida.