Alexander Cossio

La tentaciĆ³n

 

Del libro La Vida es Viviendo

 

Pequeña dulzura

de niña sensual

que en mis ojos pones

tu amor virginal.

 

Angelín travieso

de traje casual,

sales a la calle

a hacerme pecar.

 

Eres paz y guerra

dentro de mi mente,

cuando tú me miras

yo muero sonriente.

 

He muerto cien veces

y sigo esperando

que tú me asesines,

aunque sea amando.