En silencio, entre sedas
Sin lumbre ni recuerdos,
Con angustia y soledad unidas,
Confabuladas, quebrando mi vivir.
Suspirando, evocando, contemplando
Pensamientos infinitos
Con final sin comenzar,
Sin caminar ni trasegar.
De pronto, emerges, renaces
Del fondo de mi ser,
Del querer adormecido
Por el yerto frio del olvido.
Olvido…
No lo creo,
Delirio…
Es sincero
Sin frustrar mis temores.
Desnudando mi débil voluntad
Rindiéndome con mis manos
En el aire, con mi cabeza
Al piso y mi orgullo…
Hay mi orgullo…
Enfrentado con mí ser.
Venciste,
Alegres suplicas traspasan tu sentidos,
Diversos colores de victoria agrandan más
La venganza oportunista de tu piel.
Y…
A tu merced queda indefenso
Mi existir,
Mi vivir,
Mi injusto sufrir.
Tómame,
Valórame y ámame
Incrústame tu amor
Más no tu dolor,
Implanta tu ternura
Y asesina mi frialdad.
Inunda mi ser con tu amor
Y desecha mi adolorida alma
Construye con tus besos
Mi nuevo corazón
Que estará hecho par ti.
Milton Salazar
Derechos Reservados