Hidalgo Caballero M.

Vivir


Sórdidos y mezquinos pensamientos humanos
que rompen los caminos de luz y esperanza,
voy a encender mil llamas, aún apagadas,
con lamparillas brillantes como luz en la mañana
como el reflejo del sol en agua transparente.
Y reírme del tiempo que siempre se acaba
guardando presencias y múltiples esencias
cristalinas y vividas o soñadas y deseadas.
Sin recordar el pasado, ni pensar en el futuro
y gozar el momento sin escuchar argumentos
que corrompen el encanto y matan la ilusión.
Vivir, vivir, vivir con el Corazón y el Alma,
como vivieron antes de las cosas más sencillas,
como amaron antes con ingenuas caricias,
sin complicar la mente con exóticos dilemas
que minan la confianza y destruyen el amor.