<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:612.0pt 792.0pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:36.0pt; mso-footer-margin:36.0pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->
Hay una inmensa luna amarilla
al final de la carretera
(no faltará quien piense:
Otro poema más a la luna llena!
Y yo le respondería:
Acaso no ves como la luna inspira?)
Cómo no dedicarle un poema a la luna
si hay un fantasma azul
atravesando el aro de luz?
Cuántos sueños se esconden en ella
Y cuántos amores dejados atrás?
Mientras nosotros continuamos
con el viaje sin fin
siempre hacia el sur,
la luna sigue allí inmutable
al final del largo camino,
hacia donde van nuestros sueños
cargados de luz, sombra y misterio.
<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:595.3pt 841.9pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:35.4pt; mso-footer-margin:35.4pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->
Todos los derechos reservados para © Susy Espeche. Prohibida la venta y reproducción de esta propiedad intelectual.