Morante

TRAGEDIA

 

Aquella tarde el sol
Se acostó pronto
Con su bufanda violeta
Imagino que presagiaba
Que en los angares del cielo
Algo no iba bien
Olía a barro, a muerto
Como un enjambre de hienas
Cuando borran de la tierra
El más diminuto hilo de vida
Que se ahoga entre sus fauces
Suplicando morir para no ser nadie

Dios miraba
Desde su atriz repleto de ángeles
La noche callaba, vacía, expectante
Veinte estrellas custodiaban
El Reino del aire
En la tierra los ríos
Se escondieron en los mares
Las flores de los campos
Volvieron a sepultarse
Para nunca haber nacido
En esa primavera
Que no acababa de cuajarse

Aquella tarde
Ni la olvido
Ni quiero acordarme
Pero esa tarde existió
Como existe Marte
Y tú te fuiste, sola
Con un silencio inmutable
Con tu cara pintada de mentira
Por falta de verdades
Y yo me quedé frio
Mirando tras el cristal
Como te tragaba la calle

José Antonio Morante