Él la contempla a lo lejos
como tratando descifrar
¿como es que funciona el universo?
La mira con ojos que desean
más que un ¡hola! un, ¿Qué tal?
Como mira la punta del lápiz
la goma de borrar.
La mira y se pierde en las
ondulaciones de su azabache pelo..,
imaginando cuantos hebras
componían su hermosa cabellera.
La mira como mira el universo al presente, imaginándose si, un segundo a su lado,
podría llenarle por siempre.
La examina pacientemente
con el algazara de su mutismo;
con la valentía de su miedo,
con las palabras que sus labios
terriblemente temen, pero sabía,
que si algún día, llegara a pronunciarlas-,
pudiera cambiar su lúgubre monotonía.
Él vislumbraba que besarla
debe sentirse como cuando
llueve y nieva fuertemente,
y de pronto, se calienta el clima.
La concibe animosamente
como mira Antártica el calor
del trópico Caribe.
La miraba y respiraba
para fundirse en el aroma de su existencia.
Su olfato por primera vez, encontró su encargo.
La mira y siente una paz y agonía simultáneamente,
siente miedo y regodeo tan solo al pensarla,
se siente victorioso al solo mirarla,
entiende por primera vez,
porqué la lluvia toca la tierra,
porqué las aves se enamoran de su cielo,
entendió la circunferencia de la naranja
y el porque si le falta una tajada...
nunca está completa.
La miro detenidamente,
con emoción, con deleite
y nuevamente se convenció de que
ella ¡nunca podría responderle!
LeydisProse
3/2/2018
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