Jorge Menelio Tróchez

MUJER

Me enamoré de tu mirada,

tierna y llena de locura.

Se marchitan tus pétalos

y se caen tus espinas,

pero tu mirada

sigue siendo la misma,

aunque pasen mil inviernos

y se vayan con ellos,

mi vida.

Me enamoré de tu alma,

apasionada y seductora.

Porque aunque se muera el Sol

y reine la noche,

tu alma

sigue siendo joven.

Joven a pesar de las ventiscas

tristes y dolorosas,

a pesar de eso,

tu alma sigue siendo,

hermosa.