Xabier Abando

Rendido a tus pies

 

A tus pies caigo rendido,
mi anhelado sueño, y luego,
en tus brazos yo me entrego,
hasta perder el sentido.

Te necesito a dïario,
como un arraigado vicio,
que no acarrea perjuicio,
ni un efecto secundario.

Si algún día no te tengo,
confuso y malhumorado,
como un \'zombie\' voy y vengo.

Me amuermo si voy de fiesta
sin haber antes gozado
de ti, mi bendita siesta.


© Xabier Abando, 07/11/2016