Adrián

Ausencia inseparable

Noto tu ausencia
desde lejos
desde aquí.

De norte a sur
y de este a oeste,
desde todos lados
y desde fuera y adentro
noto tu ausencia,
también desde Madrid.

Noto tu ausencia
cuando recuerdo
tu pintoresca mirada
y tus besos
con los que me drogaba.

Kata, catalizadora
de sexo y amor
tu ausencia me vacila
aunque tengo que decirte
que de manera catastrófica.

Noto tu ausencia
cuando mi corazón
es el barman que sirve un cubata,
de recuerdos que de ti tengo,
a mi hipnotizada alma.

También noto tu ausencia
en un garito con mi caña
y pintxo de tortilla
e imagino, como lo hacía de niño,
acariciarte una mejilla
mientras te confieso
que es mi ansia
quererte de verdad
y no de ensueño.

Noto tu ausencia
aunque esté en una fiesta
repleta de top models,
mi mente encarcela
a mi condición de mujeriego
porque mi corazón solo a ti te acepta.

Tu asuencia es como un pájaro
que nunca emigra
o como la belleza disfrazada de esqueleto,
qué gracioso
pues parece ser que se le olvidó
que halloween fue hace tiempo.

Noto tu ausencia
desde el campo
junto a mi soledad y una cerveza
mirando al cielo estrellado
con un horizonte cansado de ser horizonte
que todo el rato bosteza
mientras se queja
de que ya no tiene aguante.

Jugando con mis recuerdos
noto tu ausencia
¿Cuál de ellos ganará el encuentro?
¿Nuestros momentos de cerveceo, labios húmedos y líquida chanza?
¿De miradas procedentes del país de nunca olvidarás?
¿Los besos típicos de película de Woody Allen?
¿Sin olvidar de hacer el amor con limón y sal?
¿O nuestro sexo políticamente incorrecto que anhela ser (tele)transportado a la vida real?