Ivanna

He de llegar

Si a tus ojos he de llegar un día

espero no sea arrastrándome o de rodillas,

pues quiero sentirme digna de tu amor.

Y aunque en el camino me canse y tropiece

no quiero que tu corazón se entere

que fue causante de algún dolor.

Tú, mi pedazo de vida faltante,

no tienes que preocuparte por mi desolación,

continua feliz y sonriendo

aunque tengas el presentimiento

de que este ser poco a poco pierde la razón.

Sé sobreponerme y soy fuerte,

por ti rompo las barreas y, valiente,

llegaré de pie y con vida hasta tu corazón.