Soy un hombre, desnudo, al mundo abierto,
que el corazón entrega a manos llenas,
me gusta compartir las cosas buenas,
y soñar que en tus brazos me despierto
pues tengo para ti plantado un huerto
de flores: mirtos, rosas y azucenas.
Soy un hombre que rompe sus cadenas
y cruza solitario su desierto.
Soy un hombre que sigue su camino
sin trazar de antemano alguna meta,
de lo humano conversa y lo divino.
Soy un hombre que vuela cual cometa
sin brújula, sin rumbo y sin destino.
Soy un hombre con alma de poeta.