Marlon Saúl Pérez Solis

Castidad

No la pierdas por momentos de dudas, aunque tu corazón te obligue a gritar; no consientas.  

No escuches las palabras de miel que buscan fundirse en tu piel, pues los egoístas y deseosos buscan su único bien.  

Tu pureza es inigualable,  muchos la pierden por locura  y otros con premura.  

Nada como esa flor que ninguno ha tenido, que ni el secreto ha poseído.  

Ciñete, y anhela pues la primavera se obtiene tras una buena espera.  

Marlon Pérez  Enero 2018