Rosita de Mendoza

Mi Ășnica esperanza

Como una flor en el fango

Mi esperanza se enloda

Como una perla a los chanchos

La tiro a cada hora

El amor, la ilusión, la vida

Ya no tienen donde anclarse

Te miro pequeño

Y sé que lo tengo todo

¡Qué vergüenza mi niño!

No veo un mejor futuro

No puedo cambiar el mundo

Para que crezcas seguro

Allí están los demonios

Acechando tu cuna

Y aquí estoy  tan débil, tan frágil

cuidando tu sueño

No me sueltes

Aunque no lo sepas pequeño

Tú eres quién me sostiene