Louiser Nandes

Tres, ya son masacre

Uno.
Sencillo y entendible,
se cautiva pronto.
Presa fácil, destructible;
en las garras de la dulce niña
que parece ser sensible.

Dos.
Una injusticia por corromper amistades.
Si he llegado a ser odiado,
me he equivocado.
Por no haber visto lo que era,
ni experimentado en cabeza ajena.

Pero de diez millones en la tierra,
sea a él al que ataque:
Tres, ya son masacre.