Edna Diaz

Un soneto para Dios

 Señor, otros son mejores poetas que yo.

 Te han cantado  con más devoción

 en actitud de gran gozo y muchos

 vienen con humillación en el corazón.

Dios, no soy mejor que otros y

a veces pienso que soy lo peor,

pero tus elevados pensamientos

me hacen sentirme mucho mejor.

 Tú me conoces, Señor, en  medio del dolor.

¡ Cuánto daría  yo por librarme del tormento

 que sacude mis amargos recuerdos!

Ten misericordia y compasión porque

nos veremos en algún momento

cara a cara Tú y yo.