Raul Gonzaga

De la madurez al ocaso

 

V
Olvidé ese cruel pasado,
Y procuré revivir;
Nada pude conseguir,
Perdí todo lo logrado;

Pero, a pesar de mi estado,
Quise de nuevo sentir,
Que podría yo seguir
A pesar de estar dañado;

Conclusión, yo más me hundí
En un pantano letal,
Donde todo lo perdí;

Mas seguí fuerte y cabal;
Todo el dolor reprimí,
Seguí en pos de mi ideal...

VI
Me aparté de esta locura,
Mi pasado se extinguió,
Tal vez no me perdonó;
Pero confié en la ternura

De fatua luz que muy pura
En sus inicios me pareció;
Pero raudo se pasó
Lo dulce de esa aventura;

Me refugié nuevamente
En mi búsqueda interior;
Y procuré ardientemente

Un saber muy superior;
Percibí conscientemente
Que no hay más luz que el amor…

VII
Hoy, ustedes son testigos,
Acepté mi situación;
Entregué mi corazón
A verdaderos amigos;

Ya no más fatuos abrigos,
No más burlas ni traición;
Misericordia y perdón,
No más rencor ni castigos;

Publiqué viejas locuras,
Nueva gente conocí
Nunca exenta de amarguras;

Pero si algo aprendí
Que más que nada su ternura
Es la que me hace feliz…