kavanarudén

Fugaz presencia

 

Solo fui el suspiro en una noche de luna llena.
El color desteñido de una vieja azucena.
El aroma fugaz de una fragancia prohibida.
La esperanza desvanecida en una despedida.
El humo de un cigarrillo que pronto se olvida.
El vapor de una taza de té humeante.
El simple acorde de un bandoneón errante.


Un momento, un instante, un pobre e iluso amante;
que en tu vientre, por una noche, encontró cobijo.
Fuiste mi cálido escondrijo.
Por un efímero instante.


Desapareciste dejándome suplicante.
Desde entonces imposible ha sido olvidarte.
Te busco mas no te consigo.
Sin querer te llevo en mí, conmigo.
Triste y cruel realidad, mi corazón llevaste contigo.