Héctor Martínez Sanz

A la Sierra de Guadarrama

Madrid, ¿qué sería yo sin tu Sierra

Coloreada de espumosa nieve,

Sin las faldas que coqueta remueve

 En pasos de baile sobre la tierra?

Entre sus riscos mi niñez se aferra

Cortada al filo del recuerdo breve,

Como la mísera gota que bebe

El viejo cuerpo que la edad entierra.

Juntos vencimos la erosión del viento,

De la lluvia, la vida y la memoria,

Por la fugaz ventana del momento;

 Y juntos vemos hoy nuestra victoria

Hecha jirones del roto lamento

Que suspira por repetir su historia