Raquelinamor

AVE SOLITARIA

El llegò a mis sueños como el Ave solitaria,
batiendo en mis cielos, sus grandes alas de amor,
traìa música en su viguela pasionaria,
del sagrado recinto donde se alberga el mar,
estando dormida,  yo le abracé en mi dolor,
y el viento movió las mías con ansias de volar.

Las notas enrumbaron hasta mi corazón,
mientras que los azules besos del mar mecenas,
rociaban la inmensidad de la constelación,
y atravesé a las gigantes montañas de penas,
para encontrar el fugaz rastro de seducción.

Volé presurosa al reino de la fantasía,
donde vivía muy callada la inquieta flor,
y cuya fragancia dulzaina deleitaría,
a la Diosa esplendorosa del sublime amor,
y  entendió aquella ave gris  ¡Cuán sola en mi lecho,
perdida y  sin melodías, morìa de amor.

Pudo elevar sus alas y dejarse querer,
congeló un tiempo breve junto al atardecer,
y unió en efímeros lazos al cóndor del sol,
así pasaron las horas de olas y gemidos,
minutos y segundos a sombra del Seol,
con el tic tac ardiente de un corazón sufrido,
esperar un cielo nuevo hasta el amanecer,
creyendo que algun dia su gran amor merecer.

Parò el Reloj de su débil humanidad mansa,
bajo el silbido triste del turpial y el Cristofuè,
aquel dueño alado que en su emoción descansa,
navegante que a través de  latidos se fue,
dejándome  llanto, canto del alma que danza.

Muere canturreando por su ave solitaria,
colgando en su nido a la viguela del cantar,
y en corriente de sus  lágrimas navegaría,
pero jamàs su alma dejaría de tocar,
la lluvia de estrellas, el azul del cielo y  mar,
nacida siendo libre junto a la eternidad.

Raquelinamor
Mayo 26, 2018