alejandro fozar

XXXVI. RĂ©quiem de un amor

 

Réquiem  de un amor perdido

entre las inmortales agujas de las horas,

desgarrándose en estériles  esporas

y desterrándose como un rey caído.

 

Antes de quemar con alcohol de su perfume

pesadas lágrimas de piedra y fuego,

Pare la luna desdichada la soledad que asume

Con los racimos pétreos del ruego.

 

Amor servido en el cadalso

ante la soga de dos fieros verdugos,

Que sobre sus brasas pisaron descalzos

que sobre sus besos clavaron tarugos.