El Hombre de la Rosa

¡¡¡ OS NEPHILINS PROTEGEN AL HOMBRE !!!

 

¡¡¡ OS NEPHILINS PROTEGEN AL HOMBRE !!!

 

*** Versos de la Rosa ***

 

Aunque parezcan espíritus los antepasados humanos

son hombres de civilizaciones vivientes en el Cosmos,

para diseminar su raza hermana en planetas capaces

donde esos homínidos sean aparentes para inseminar,

ellos fueron los que construyeron este jardín en Edén

mucho tiempo después del gran cataclismo mexicano,

allí inseminaron a los homínidos su sabiduría humana

prohibiendo la promiscuidad sin control de su ciencia,

para estabilizar los poderes naturales que nos rodean

sin herir el delicado hábitat del bosque y los animales.

 

Las civilizaciones han padecido cataclismos rigurosos

sin esta potestad de salvar la naturaleza y lo humano,

como los protectores con una tecnología inimaginable

dominando sus inimaginables potestades Universales,

cuando todos sobreviven fuera de la corteza terrestre

desde su inicio de los últimos tiempos de cataclismos,

sólo nos apoyan cuando ven amenaza nuestra especie

como muestra un diluvio terrestre con el Arca de Noé,

donde sus nefelios evacuaron a los humanos elegidos

hasta que ese momento de proteger sean invalidados.

 

Ningún Gobierno del planeta Tierra quiere entenderlo

ignorando que ha habido secretos contactos con ellos,

por los recelos de la tremenda diferencia de sabiduría

ellos no quieren dejar esos conocimientos a la ciencia,

por nuestras dilatadas guerras de ególatra arrogancia

cuando dejan por todas partes la ferocidad sangrante,

anhelando que los moderen extraterrestres vigilantes

que pretenden ayudarnos sin interponerse a la Tierra,

cuando alguno de ellos convive entre tu familia social

como modelo nos estudia como testigo de protección.

 

El macho y la hembra se proscriben por promiscuarse

tienen que merodear por la Tierra cazando por comer,

siendo epidemia por sus luchas crueles que fomentan

cuando ven su crueldad del hombre con sus humanos,

ante su temor que militares manipulen esa tecnología

masacrándose sin cuajo ni cuartel entre ellos mismos,

otro cataclismo es la manera que cure su enfermedad

cuando los Nefelines no sepan salvar nuestro planeta,

llegará su instante del tránsito del Sol que os calienta

será el tiempo de encontrar otra Tierra en el Universo.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

22 de noviembre 2017