La alcoba ideal anhela el azar de las alas de un ciego,
el amor inquietante ilumina la noche
ahíto de esquinas silenciosas…
y yo languidezco estremecida en la bruma innombrable…
Abrasada en el círculo fugaz…
inhalando poesía por cada poro…
transida, iluminada, inane…
el seno efímero, transitorio…
la sed entrecortada, desconocerse.