carlos obeso

La luna tiene envidia

Horas llevamos amándonos.

Vaciados ya de todo orgasmo

solo somos dos charcos

de sudor caliente,

de lluvia y semen.

Te muerdo los labios.

Todos los labios.

Me alimento de tus espasmos

La luna se tapa los ojos 

vergonzosa por el espectáculo

pero en el fondo tiene envidia

y sueña con ser penetrada,

fuerte, por todos sus cráteres.

 

¡Qué golfa eres luna!

¡Qué golfa!