Jareth Cruz

UNA CHICA ESTÁ LLORANDO

(Redondillas)

Una chica está llorando

al leer este poema,

en su corazón le quema

porque vive recordando.

Fueron días de tristeza

los que ella siempre vivió

y aunque su amor la dejó

aún vive en su cabeza.

Ella de él se enamoró,

le entregó su corazón

sin ninguna condición

y él tan caro le pagó.

Ella siempre le brindó

toditita su confianza,

siempre tuvo la esperanza:

esa que él nunca le dio.

Una chica está sufriendo

en algún lugar del mundo

y sufre cada segundo

con esto que está leyendo.

Él nunca, nunca la quiso,

siempre la trató muy mal

y todo le daba igual,

un cariño nunca le hizo.

Ella siempre encontraba

la forma de complacerlo,

pues, feliz quería verlo

pero, él no lo notaba.

Una chica está llorando

por quien no vale la pena,

ella, de dolor se llena

y se está desahogando.

Esa chica está muriendo

de tristeza y de dolor

porque su único amor

ni un poco la está queriendo.

Esta historia la conozco,

pues, soy el protagonista,

fui un cobarde, un machista

muy tarde lo reconozco.

Esa chica está llorando

y la culpa es sólo mía

y su herida todavía,

todavía está sangrando.

Fueron días de tormentos

de angustias y de dolor,

nunca valoré su amor,

siempre herí sus sentimientos.

Una chica está llorando

cuando lee así se pone

yo espero que me perdone

porque le estoy amando.

Esta historia, a mí, me azota,

si la lees yo te pido

que me perdones. Yo he sido

un imbécil, un idiota.

Nunca supe comprenderte,

la verdad es que fui tonto,

ahora no puedo verte

¡Oh, mi Dios, llévame pronto!

Ya no quiero sufrir más,

ni que ella sufra, tampoco,

ya me estoy volviendo loco,

no puedo vivir en paz.

Yo recuerdo aquellos días

cuando siempre te ignoraba,

mientras, la espalda te daba

tú, a mí, más me complacías.

Esos recuerdos me matan,

me destrozan toda el alma,

Sé que nunca tendré calma,

a tu dolor, ellos, me atan.

Una chica está llorando

al igual que lloro yo,

ella nunca me dio un “no”

y eso, a mí, me está matando.

Cada noche, cada tarde,

cuando reina ese silencio

en el cual siempre presencio

a mi corazón cuando arde;

me pongo triste, muy triste,

por haberte, así, perdido,

persona como yo he sido

en el mundo ya no existe.

Pero ahora ya es muy tarde,

no puedo corregir nada,

ya no tengo tu mirada,

nada para hacer alarde.

No puedo escuchar tu voz:

esa bella melodía

que buscaba día a día

lo mejor para los dos.

Un beso nunca te di

ni jugué con tus cabellos,

nunca supe que eran bellos,

su aroma no conocí.

Hoy, yo te quiero decir

por medio de este poema

que siempre serás mi gema

y en mi alma vas a vivir.

Como pude ser así

cuando tú me dabas todo,

me ayudabas de algún modo

y las gracias no te di.

Y aunque sé que aún me quieres

se bien que no has de volver,

porque tengo otra mujer,

aunque por verme te mueres.

Me lo han dicho tus amigas

y eso me mata por dentro

nunca habrá ese reencuentro

es mejor que ya no sigas.

No quiero saber qué lloras

por mi culpa, por mi culpa

pues, no basta una disculpa

por el llanto de mil horas.

Una chica está llorando

y yo me quiero morir

nunca debí dejarla ir,

hoy, mi error estoy pagando.

Esa chica me quería,

me adoraba como a Dios,

lo que fuera para dos

sólo a mis pies lo ponía.

Esa chica fue sincera,

ella siempre me fue fiel,

la dulzura de su piel,

para mi, solamente, era.

Si alguien, por casualidad,

la mira, la llega a ver…

díganle que es mí querer,

toda mi felicidad.

Díganle que sufro mucho,

desde el día que se fue,

que ahora vivir no sé,

desde que su voz no escucho.

Echo de menos tus besos,

tus caricias, tus palabras

y aunque tú alma ya no me abras

sé que en ella ya estoy preso.

Cuánto diera por volver

a tenerte una vez más

pero no será jamás,

todo quedó en el ayer.

Por ti, hoy, todos me preguntan

¿Dónde está la chica buena?

mi alma de dolor se llena

tantas cosas se me juntan;

y sólo quiero llorar:

ese nudo en mi garganta

que en las tardes se agiganta

yo lo quiero ya soltar.

Ella siempre satisfizo

cada uno de mis caprichos.

Con cada uno de mis dichos

una canción, ella, me hizo.

Ya no quiero recordarla

porque me hace tanto daño

y, yo, todo de ella extraño,

nunca podré olvidarla.

Una chica está llorando

y son lágrimas de sangre

es como si algún alambre

la estuviera lastimando.

Esa chica está gritando

en silencio su dolor

porque a su primer amor

ella, aún está amando.

Yo recuerdo aquellos días

cuando salíamos juntos

y charlábamos de asuntos

que tú nunca comprendías.

Yo te pido ya no llores

por mi, no vale la pena

mejor dicta mi condena

y hacedme cosas peores.

Echadme ya, por favor,

de una vez en el olvido

que lo tengo merecido

por no valorar tu amor.

Nunca te hice una caricia,

ningún gesto, ningún guiño,

no te demostré cariño

cuando diste una primicia.

Cuanto me hubiese gustado

haberte correspondido

como tú habías querido,

como lo habías soñado.

Mis asuntos fueron otros,

el amor fue secundario,

no creí tan necesario

velar tanto por nosotros.

Hoy, todo eso me lastima,

cada recuerdo es espina

que mi mente no domina

y ésta se le viene encima.

Y pierdo la paz, la calma

al cargar con esta cruz,

nunca podré ver la luz

en las ventanas de su alma.

El perfume de tu piel

se ha esfumado como el humo,

el mío era como zumo

y más amargo que la hiel.

Desde que te fuiste vivo

como pájaro sin nido

y, nada tiene sentido

si tu luz yo no recibo.

Ya no llores, muchachita,

otro amor has de encontrar

y tú tienes que olvidar

que, por mi, estas marchita.

Olvida que fuiste mía,

olvídalo, por favor,

aunque yo no olvide, amor,

ningún golpe de alegría.

Una chica está llorando

como llora un angelito

cuando lo dejan solito

y le están amamantando.

Yo quisiera agradecerte

por todo lo que me diste,

muy buena conmigo fuiste

me dolió mucho perderte.

Estoy pagando muy caro

todo ese daño que te hice

y aunque mi alma no lo dice

con un ogro me comparo.

Soy el peor ser humano,

que en la tierra ha existido,

nunca te compré un vestido

ni caminé de tu mano.

Siempre te traté muy mal,

te herí con mi indiferencia,

me remuerde la conciencia

y eso no tendrá final.

Como extraño esa mirada

de cristal y, penetrante

que brilló como diamante

al estar enamorada.

Las palomas de tus manos

anidaban en mi cuerpo

y se detenía el tiempo

cada vez que nos besábamos.

Ese y otros recuerdos

se adueñaron de mi mente,

hoy, te busco entre la gente

y te busco y más te pierdo.

Ahora el remordimiento

no me deja en paz ni un rato

y qué bajo, qué barato,

qué poca cosa me siento.

Una chica está llorando

y es por mi culpa, lo sé,

porque no la valoré

cuando ella me estaba amando.

y si de llorar no paras,

yo quiero que me maldigas

porque, aunque nunca lo digas

con un santo me comparas;

y, yo he sido lo peor,

una rata de dos patas

que se junta con las gatas

y traiciona al roedor.

La verdad yo nunca tuve

un poco de amor por ti

y ahora que te perdí

mi dolor se eleva, sube;

y, también estoy llorando

al escribir esta letra,

una aguja se penetra

en mi corazón tan blando.

Autor: Jareth Cruz

San José, Costa Rica

Titulo: Una Chica Está Llorando

Código: 1403090325814

Fecha 09-mar-2014 16:51 UTC