LisNazareth

Permisividad a los deseos del cuerpo

Un choque: mis antiguos impulsos y la recuperación de la conciencia.

Sé que las cosas andan mal cuando me estorba el pensamiento,
una consecuencia de la permisividad a los deseos del cuerpo
cuando el roce con las sábanas no te puede borrar los paradigmas,
nace un estigma
de una fragilidad encontrada.


Cambiar imaginar sensaciones
por sentirlas
en búsqueda de sacarle punta al lápiz con vivencias,
revisando fotos viejas
encontré incoherencias,
sentimientos inverosímiles
que no calzan en mi existencia.


Me reconocí una extraña
y me invade la impaciencia
pensando: ¿en qué pensaba?
la necesidad de la experiencia
nos vuelve los más creativos
conquistadores,
en el mapa: la ruta señalada,
estrategas de primera
de nuevas demencias emperadores,
por eso hay que tener cuidado
con lo que se desea,
una vez que lo tenemos entre manos
descubrir no ser lo que buscamos,
nos puede dejar trizados
a un recuerdo entrelazados.