Jesús Oscar Ugalde

DEJA Y PERMITE

Deja que tu esencia me incite.

Deja tu quietud en el deceso.

Deja revelarme en un suceso.

Deja que el impulso nos habite.

 

Deja que el letargo nos evite.

Deja liberar ese auge preso.

Deja escapar tu propio exceso.

Deja que el calor no debilite.

 

Permite la malicia que dispersa.

Permite llamados seductores.

Permite en placeres verte inmersa.

 

Permite fastuosos esplendores.

Permite encausar de dicha adversa.

Permite ver del alba los colores.